sábado, 11 de mayo de 2013

Que Es Mejor Para Mi Perro El Collar o El Arnes



COLLAR O ARNES

Una disyuntiva tan controvertida como antigua: qué es mejor para pasear a tu perro, ¿el clásico collar o el a priori confortable arnés? Muchos coincidirán, pero no encontrarás una respuesta general común. Por ello, lo que sí te mostraremos nosotros son las ventajas e inconvenientes de utilizar un collar o un arnés a la hora de sacar al perro a pasear o hacer sus necesidades.

Antes de nada, lo principal es aclarar que en caso de duda, la solución más adecuada es acudir al veterinario.

Los innatos instintos primarios de las múltiples razas existentes empujan –y nunca mejor dicho- a los canes a actuar en función de las necesidades por las que fueron concebidos. Por ello, al colocarles un collar o un arnés habrá que tener en cuenta si nuestro perro es guardián, cazador o de pastoreo.

Además, hay razas que presentan problemas respiratorios (como los Bulldog franceses) o de espalda (los Teckel), lo que será un aspecto más a tener en cuenta. De ahí la importancia de consultar a un veterinario ante cualquier duda.

Ventajas e inconvenientes del arnés



Ventajas: el arnés permite un mejor control del perro, por lo que es una buena opción en caso de tener un perro "rebelde". Además evita ahogamientos, por lo que es propicio para perros con problemas respiratorios o que tiren demasiado.

El arnés también permite mantener al cuello del can libre, por lo que es ideal para sabuesos como los Basset.

Inconvenientes: el arnés es bueno para los perros que tiren demasiado…, pero a la vez contraproducente en caso de que el mismo sea de tiraje. Un Husky, por ejemplo, leerá la colocación del arnés como una clara señal de que debe tirar, azuzado por su instinto, por lo que no es aconsejable.

Por otro lado, los expertos aseguran que algunos perros podrían acabar teniendo problemas de espalda.

Ventajas e inconvenientes del collar

Ventajas: controlas directamente la cabeza de perro, por tanto es bueno en caso de que sea un poco "peleón". Además el collar es más cómodo de colocar, y para un perro adiestrado es la mejor opción.

Inconvenientes: la mayor desventaja del collar es que, en caso de que el perro tire demasiado, le provoque ahogamiento, y a la larga problemas respiratorios serios. Esto se debe al desconocimiento real de la presión del collar, y todos sabemos lo que ocurre cuando un perro tira hacia atrás…

Con todo, una cosa sí es clara: a menos que ejerzas un control total sobre tu perro, sácale a pasear SIEMPRE con sujeción. Además de ahorrarte algún que otro fiero encontronazo con otros perros, evitarás que pueda ser, por ejemplo, atropellado por un coche.

Así, cuál es tu elección, ¿collar o arnés?


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